Te hiciste mierda y hecho mierda te quiero.
Me decís que no querés que te vea con los ojos rojos de tanto llorar.
Yo a los ojos rojos los tengo de tanto esperar.
Primero dije que no. Después fuiste vos el que terminó todo.
Me hablabas como si fuera el y cuando te cayó la ficha me empezaste a esquivar todo el tiempo
...y yo te volví a perder.
Te estoy ofreciendo mi corazón servido en bandeja y vos lo pellizcas a ver si reacciona, como un chiquito que juega poniéndolo todo a prueba.
Como un nene sabes que los jueguetes se rompen.
Yo me muero por vos y vos te morís cayendo en el pasado.
No soy quien para decirte que te hagas cargo y te lo banques.
Fuiste vos el que lo terminó, allá vos con tu amor.
Cada vez que me decís no, mi autoestima gana un si,
y culpablemente me siento bien,
pero se que cuando me llames ahí voy a estar.
... o quizás no.
Porque sos una tentación pero no la única. No somos imprescindibles.
Intuía que esto iba a pasar porque se como funcionan algunas cosas.
Me estás cansando y estás logrando que deje de quererte.
Pero lo sé, está en mi naturaleza ser perseverante y tener paciencia. Lo que aún no he aprendido es a no desesperar.
Estás mal y me ponés mal, pero a mi al rato se me pasa y a vos la angustia te condena.
Se que no perdiste nada, espero que lo entiendas. Te liberaste de algo para que la carga sea mas liviana, para que vueles más alto, para que observes en panorama.
Dame una chance pero que sea a tiempo.
El dulce tiene fecha de vencimiento y un pico dulce en una hora se acaba.